“Insomnia” una experiencia visceral que no pasa inadvertida
Detrás de escena: una charla íntima con Leonela Laborde y Martín Pereyra
El legado poético de Alejandra Pizarnik se materializa en “Insomnia”, la más reciente creación del grupo Musa Híbrida. La experiencia teatral que proponen Martín Pereyra desde la dirección, Leonela Laborde desde la interpretación con la asistencia de Martín Pironi es una provocación a los sentidos que se puede apreciar esta temporada en El Galpón de las Artes.
El grupo de experimentación teatral Musa Híbrida cumple diez años de trabajo ininterrumpido en Mar del Plata. La celebración del aniversario se da con la presentación de “Insomnia”, unipersonal en donde las palabras no hacen falta para imprimirle al público sensaciones y hasta escalofríos.
La inquietud y el abismo en la que decidieron indagar es de una convicción tal que se respira en la sala. La tensión es permanente y cuando llega al final, en un punto, hay quienes se quedan con ganas de ver qué más hay en este universo que decidieron compartir. Es de esas obras que apelan a seguir presentándose y que se sugiere que se vean más de una vez.
Función a función Leonela Laborde y Martín Pereyra comparten con El Galpón de las Artes cómo transitaron el proceso creativo, qué técnicas utilizaron para crear las diferentes máscaras y dispositivos y hasta publicaron un libro con la dramaturgia literaria de la obra: el texto es un palimpsesto construido a partir del universo literario y biográfico de la poeta “maldita” Alejandra Pizarnik, la que nos sumerge en el oscuro pantano de la existencia, aquel donde la palabra y el lenguaje se desgarra y se atraganta por no poder nombrar lo invisible, aquello que es indecible.
Este jueves 13 de febrero, el grupo presentará un nuevo apéndice de la obra: la muestra “El resto como sedimento” con creaciones plásticas, de Leonela Laborde, del universo objetua de Insomnia.
Para quienes no conocen ¿Cómo nació Musa Híbrida?
(Martin Pereyra) Empezamos en el 2015 con una obra que se llamó ‘Butaca 27’ y en estos años hicimos seis espectáculos, este sería el séptimo. Todas las obras que hicimos a partir del 2017 fueron producidas, ensayadas y con funciones en El Galpón. Tengo un vínculo más histórico con Mariano con Claudia, acá hice mi primer trabajo de dirección y lo hice en la sala antigua que estaba en Rawson, hace veinte años que producimos en esta sala salvo excepciones de otros espectáculos que hemos hecho en nuestro propio espacio que se llamó El Foco y tuvo una vida de 4 años.
Con la preponderancia que hay de la palabra es notable cómo ustedes eligen abordar una obra desde una poética más visual
(Martin) Tomamos terminos del cine más que del teatro para construir estas experiencias más que obras, intentamos que cuando el espectador venga pueda transitar una experiencia más que una historia
(Leonela) En realidad no le damos preponderancia al texto, le damos preponderancia a lo plástico, la imagen, le damos un lugar al sonido y la iluminación que quizás quedan supeditados a otras propuestas. En nuestro caso es nuestra Musa híbrida, y por eso nos identificamos con ese nombre, tiene tanta y más importancia que quien pone el cuerpo.
(Martín) Estamos convencidos en algún punto en que el lenguaje de la palabra es un limitante para transitar determinadas experiencias. Sentimos que lo que hace es dirigir la atención del espectador hacia un sentido y quizás la imagen tiene una fuerza polisémica si está bien construida y tiene una cierta tensión dialéctica que punza mucho más directamente lo prerracional, lo consciente o lo intelectual solamente.
“No le damos preponderancia al texto, le damos preponderancia a lo plástico, la imagen, le damos un lugar al sonido y la iluminación que quizás queda supeditado en otras propuestas”
¿Qué los invita a El Galpón de las Artes como espacio de creación?
(Leonela) El principal motivo por el cual elegimos esta sala tiene que ver con la elección de una compañía netamente horizontal, así como los lenguajes no tienen más sentido uno que otro o más preponderancia tampoco lo es en la compañía. El director no es más que el actor, ni más que el muñeco ni más que la luz y por eso nos identificamos con El Galpón de las Artes porque tiene esa forma de trabajo cooperativa como la tiene Musa Híbrida.
(Martín) Es concebir a las construcciones artísticas como más horizontales y sin jerarquía de valores en cuanto a los roles. Hay rondando en el teatro como el dramaturgo como el máximo Dios intocable, intachable y en general en un 90% es hombre. Por contextos históricos la figura del rol de dramaturgia y dirección de la mujer fue muy limitada. Recién en los últimos 30 – 40 años empieza a tener una mayor participación. Desde ese lugar también lo pensamos como una compañía anarquista
En Musa Híbrida desde quien hace la luz, manipula, el director, dramaturgo siempre trabajamos de una manera cooperativa y eso nos parece una postura política en nuestra manera de construir
¿Si tuvieran que definir para qué público fue pensada la propuesta qué dirían?
(Martín) Las categorías son complejas, son como etiquetas o nomenclaturas que me parece que son funcionales a la máquina cultural, la picadora cultural, al sistema que lo que busca es que todos entendamos lo mismo. De alguna manera lo nosotros hacemos es no anclarnos en un lenguaje, un género, una poética ni yo mismo la podría definir, estamos influenciados por un montón de tradiciones muy antiguas desde el surrealismo, desde el teatro de objetos, de animación o visual. No creo que tenga una característica definible del todo, si es una experiencia sensorial o buscamos eso por lo menos que los trabajos tengan un diálogo, que sea tan polémico que puedan entablar un diálogo personalizado con cada espectador.
“Insomnia”, la última creación de Musa Híbrida, es una de las obras que ha generado una fuerte impresión en el público que asiste a El Galpón de las Artes. Tomás Bonifacio, uno de los espectadores, compartió su experiencia: “La obra me mostró la profundidad del alma humana, inspirada en la vida misma. Desde el principio, me transmitió una desazón palpable, con monstruos internos que cobraban vida a través de una criatura demoníaca. La actuación de Leonela Laborde fue realmente impresionante, logró una conexión emocional intensa que hizo del malestar una experiencia compartida. Los sonidos circundantes se vinculan con la oscuridad de la obra, creando una atmósfera de tensión que me mantuvo atrapado. “Insomnia” me invitó a enfrentarme a mis propios miedos, dejando una profunda huella en mi memoria“.
Hay espectadores, como Marcelo Di Luciano (El Ventanal), que describieron la obra como una “ceremonia mágica” con un “ambiente distópico” que a veces se sentía “primitivo y visceral”. La obra “nos interpela, nos desafía, nos hace pensar y sentir de dónde venimos, qué hacemos, cuál es nuestro futuro; un eterno retorno de nacimiento y muerte”. Y actores y directores como José Luis Britos instan a la compañía a continuar con este trabajo “minucioso, riguroso y sin concesiones”.
De esta manera, El Galpón de las Artes sigue abriendo sus puertas esta temporada de verano 2025 todas las noches a las 21:30 hs para producciones marplatenses que exploran y profundizan investigaciones que permiten abrir universos diferentes como es el caso de “Quien traerá el Alba”, una obra de teatro poético que utiliza herramientas de inteligencia artificial para derribar fronteras racionales.
